Urbanismo sostenible y del futuro

Las ciudades, los Ayuntamientos, tienen ahora por delante un futuro prometedor e interesante gracias a todo el trabajo que hay que hacer para adaptarlas a un futuro que debe ser totalmente diferente:

----Primero hay que hacer un cambio en el estilo de gobernanza y hacia la participación, que la sociedad demanda en España, en el mundo, y es un grito mudo.

Seguir trabajando en los problemas sociales, que se han vuelto acuciantes con el paro y los deshaucios, desde la democracia y la educación, aprovechando las redes sociales.

----Segundo hay que replantear la ciudad hacia la sostenibilidad, reciclando todo lo existente para cambiar las formas de consumo de energía, agua y residuos. Y aumentar la biodiversidad, vegetando las cubiertas y el confort bioclimático, orientando bien los edificios y espacios públicos.

+En este ámbito, el principal cambio es de movilidad, hay que empezar a desterrar el coche de nuestra vida y mentalizarse para usar las alternativas (bicicleta, transporte público). También observamos con ilusión la promoción del coche eléctrico.

+El segundo, muy importante, es hacia un consumo eficiente, desterrar el despilfarro, que se sustentará en rehabilitación energética y concienciación de lo que consumimos (aislar los edificios anteriores a 1979, implantar las fichas de eficiencia energética de los edificios nuevos y existentes y que las empresas gestoras de energía empiecen a prosperar mostrándonos cómo ahorrar). Se complementa con introducir las energías renovables a pequeña escala, paneles solares tanto fotovoltaicos como térmicos, generadores minieólicos (pequeños molinos de viento), geotermia, biomasa.

+Luego el agua, aprovechar el agua de lluvia para usos domésticos y evitar impermeabilizar la ciudad, p`rocurando no tomar tanta de los cursos naturales ni gastar tanto en transportarla y potabilizarla para desperdiciarla luego.

+Los residuos, aprendiendo a reducirlos en origen y con una revolución industrial del ciclo de vida, que planee su reciclaje desde que se fabrican (¿conocéis el libro De la cuna a la cuna de McDonough y Braungart?).

---En tercer lugar hay que procurar ir hacia el menor consumismo de objetos, inclinándonos por el manejo de información, desmaterializar la sociedad para hacerla una sociedad del conocimiento y no del consumo, lo que en el ámbito urbano nos aproxima a las smartcities o ciudades inteligentes.

Sobre todos estos temas os recomiendo visitar el portal Ecourbano, donde ciudades de la Agenda 21 (apoyadas por el Ministerio del Medio Ambiente) intercambian experiencias e instrumentos.

También os recomiendo que tengáis la paciencia de ver este documental donde se nos explica de la mano de varios expertos, cómo lo interesante en la actualidad es la ciudad tradicional, densa y compacta y  los edificios de consumo energético nulo. 

Se acabó el sueño del chalé y la ciudad jardín, hay que aspirar a vivir en un buen barrio tradicional y hacer las cosas más como nuestros abuelos, y más humanas también...